jueves, 28 de agosto de 2014
Bloque II: La escuela que queremos (Tonucci)
Identificar y fundamentar las características de “una escuela para todos” a las que hace referencia el autor.
¿Cuál es la importancia de la diversidad de lenguajes al momento de brindar mayores y mejores posibilidades de aprendizaje?
¿Qué relación se puede establecer entre la propuesta presentada por el autor y las trayectorias escolares de los estudiantes? ¿Por qué?
Bloque II:Diálogos sobre la educación. Flavia Terigi
¿Qué categoría de análisis nos presenta, en relación a la conceptualización de la evaluación?
Bloque II: La maestra de Garín
¿Qué significa para nuestra escuela atender a la particularidad de cada estudiante? ¿Dónde colocamos la mirada cuando reflexionamos acerca de las trayectorias escolares de los estudiantes?
sábado, 9 de agosto de 2014
Material de videoteca del Bloque II
Para reflexionar y analizar
¿Qué significado tienen las cuerdas en la vida de María
y el compañero? ¿Qué relaciones pueden establecerse
entre ellas y la adecuación curricular; entre el saber
pedagógico y la evaluación?
viernes, 9 de mayo de 2014
Prioridad 1 - Luis Iglesias (1era parte): Trabajo docente y saber pedagógico
-
Partir del interrogante:
¿Qué debe hacer un
docente para crear un
clima alfabetizador en
su clase? ¿Cómo se
propicia? Construir un
listado de prácticas y
condiciones posibles.
-
¿Cuáles son las
dificultades y las
posibilidades de ser un
docente creativo e
investigador, que centre
su trabajo en la
adquisición y desarrollo
de capacidades, en el
contexto de su escuela?
Prioridad 1 - Luis Iglesias (2da parte): Trabajo docente y saber pedagógico
-
Partir del interrogante:
¿Qué debe hacer un
docente para crear un
clima alfabetizador en
su clase? ¿Cómo se
propicia? Construir un
listado de prácticas y
condiciones posibles.
-
¿Cuáles son las
dificultades y las
posibilidades de ser un
docente creativo e
investigador, que centre
su trabajo en la
adquisición y desarrollo
de capacidades, en el
contexto de su escuela?
Prioridad 1 Leer y escribir para aprender
1.- ¿De qué manera se aborda en estas propuestas el desarrollo de la oralidad, la lectura y la escritura? ¿De qué modo se hacen visibles en la enseñanza y en el aprendizaje de los distintos espacios curriculares involucrados?
2.- ¿Qué acuerdos institucionales han construido, en esta escuela, respecto de esta capacidad? Hacer un listado enunciando acuerdos y cuestiones pendientes.
2.- ¿Qué acuerdos institucionales han construido, en esta escuela, respecto de esta capacidad? Hacer un listado enunciando acuerdos y cuestiones pendientes.
miércoles, 7 de mayo de 2014
Prioridad 2: CTA de los Trabajadores. Elogio a la incomodidad. Reunión del Consejo consultivo
Resolver por grados, ciclos, espacios curriculares, áreas o campos de conocimientos, etc.:
a. ¿Qué aspectos relacionados con la planificación se discuten en el video de la reunión del consejo consultivo?
b. ¿Por qué se propone a la planificación como una hipótesis de trabajo?
c. ¿Por qué la planificación debería ser un trabajo colectivo?
d. ¿Con respecto a qué cuestiones pedagógicas y didácticas prioritarias se toma posición cuando se planifican situaciones didácticas?
e. ¿Qué aspectos planteados en el video permitirían revisar las planificaciones de su escuela?
a. ¿Qué aspectos relacionados con la planificación se discuten en el video de la reunión del consejo consultivo?
b. ¿Por qué se propone a la planificación como una hipótesis de trabajo?
c. ¿Por qué la planificación debería ser un trabajo colectivo?
d. ¿Con respecto a qué cuestiones pedagógicas y didácticas prioritarias se toma posición cuando se planifican situaciones didácticas?
e. ¿Qué aspectos planteados en el video permitirían revisar las planificaciones de su escuela?
Prioridad 2: "Historia de la escuela (no tan) común"
Visualizar el video propuesto.
En pequeños grupos responder:
a. ¿En qué sentido una escuela posibilita oportunidades de aprendizaje?
b. Su escuela -desde las dimensiones pedagógico didáctica, relacional, edilicia, etc. - ¿brinda oportunidades de aprendizaje?
c. Posiblemente hayan realizado acciones que se constituyeron en avances para que todos puedan estar en la escuela. ¿Qué están haciendo para que el estar en la escuela implique mejores aprendizajes?
a. ¿En qué sentido una escuela posibilita oportunidades de aprendizaje?
b. Su escuela -desde las dimensiones pedagógico didáctica, relacional, edilicia, etc. - ¿brinda oportunidades de aprendizaje?
c. Posiblemente hayan realizado acciones que se constituyeron en avances para que todos puedan estar en la escuela. ¿Qué están haciendo para que el estar en la escuela implique mejores aprendizajes?
Prioridad 3: CTA de los Trabajadores. Elogio a la incomodidad Reunión del Consejo consultivo (Eje 1: Nuestra escuela: trabajo docente y saber pedagógico)
1. Luego de compartir el video, reflexionar en torno a cómo se abordan los conflictos entre los docentes de su institución y cómo lo hacen en situaciones de clase.
2. Registrar por escrito qué sostendrían y qué cambiarían.
3. Definir estrategias para monitorear sistemáticamente esos acuerdos.
2. Registrar por escrito qué sostendrían y qué cambiarían.
3. Definir estrategias para monitorear sistemáticamente esos acuerdos.
Prioridad 3: Chimamanda Adichie. El peligro de una sola historia
“Yo escucho”, dice Skliar; “las historias pueden dar dignidad o romper un pueblo”, advierte Chimamanda Adichie.
1. Promover la discusión a partir de los siguientes interrogantes: . ¿Cuántas veces escuchamos historias únicas sobre ciertos estudiantes? . ¿Cuántas veces dejamos de escuchar convencidos de ser tan conocidos que perdemos la curiosidad, la preocupación, la ternura por la historia del otro?
2. Responder: ¿Qué lazos se establecen en la escuela entre colegas y con los estudiantes? ¿Se destina espacio y tiempo para fortalecer vínculos, con el fin de mejorar el clima institucional del colectivo de trabajo?
1. Promover la discusión a partir de los siguientes interrogantes: . ¿Cuántas veces escuchamos historias únicas sobre ciertos estudiantes? . ¿Cuántas veces dejamos de escuchar convencidos de ser tan conocidos que perdemos la curiosidad, la preocupación, la ternura por la historia del otro?
2. Responder: ¿Qué lazos se establecen en la escuela entre colegas y con los estudiantes? ¿Se destina espacio y tiempo para fortalecer vínculos, con el fin de mejorar el clima institucional del colectivo de trabajo?
Prioridad 3: Carlos Skliar: Hablar con desconocidos
“Yo escucho”, dice Skliar; “las historias pueden dar dignidad o romper un pueblo”, advierte Chimamanda Adichie.
1. Promover la discusión a partir de los siguientes interrogantes: . ¿Cuántas veces escuchamos historias únicas sobre ciertos estudiantes? . ¿Cuántas veces dejamos de escuchar convencidos de ser tan conocidos que perdemos la curiosidad, la preocupación, la ternura por la historia del otro?
2. Responder: ¿Qué lazos se establecen en la escuela entre colegas y con los estudiantes? ¿Se destina espacio y tiempo para fortalecer vínculos, con el fin de mejorar el clima institucional del colectivo de trabajo?
1. Promover la discusión a partir de los siguientes interrogantes: . ¿Cuántas veces escuchamos historias únicas sobre ciertos estudiantes? . ¿Cuántas veces dejamos de escuchar convencidos de ser tan conocidos que perdemos la curiosidad, la preocupación, la ternura por la historia del otro?
2. Responder: ¿Qué lazos se establecen en la escuela entre colegas y con los estudiantes? ¿Se destina espacio y tiempo para fortalecer vínculos, con el fin de mejorar el clima institucional del colectivo de trabajo?
Prioridad 4: Pensar la escuela. Relatos de docentes y directivos. Enseñanza e inclusión (eje 3)
De acuerdo con lo expuesto en el material audiovisual, reflexionar acerca de los cambios que serían necesarios para repensar “nuestra escuela” como ámbito de aprendizaje y su importancia para la inclusión social.
Prioridad 4: Ir para retirarse
1. Luego de la proyección de los videos reflexionar acerca del impacto de las actitudes y el discurso de los docentes en las posibilidades reales de aprendizaje de los estudiantes.
2. Rescatar, de las proyecciones, elementos que deberían considerar en su institución para avanzar en la línea de la Prioridad (se podría recuperar y/o profundizar la actividad institucional sugerida en el Documento Prioridades Pedagógicas 2014-2015).
2. Rescatar, de las proyecciones, elementos que deberían considerar en su institución para avanzar en la línea de la Prioridad (se podría recuperar y/o profundizar la actividad institucional sugerida en el Documento Prioridades Pedagógicas 2014-2015).
Prioridad 4: La confianza
1. Luego de la proyección de los videos reflexionar acerca del impacto de las actitudes y el discurso de los docentes en las posibilidades reales de aprendizaje de los estudiantes.
2. Rescatar, de las proyecciones, elementos que deberían considerar en su institución para avanzar en la línea de la Prioridad (se podría recuperar y/o profundizar la actividad institucional sugerida en el Documento Prioridades Pedagógicas 2014-2015).
2. Rescatar, de las proyecciones, elementos que deberían considerar en su institución para avanzar en la línea de la Prioridad (se podría recuperar y/o profundizar la actividad institucional sugerida en el Documento Prioridades Pedagógicas 2014-2015).
Prioridad 4: Escuela de maestros. La enseñanza
1. Luego de la proyección de los videos reflexionar acerca del impacto de las actitudes y el discurso de los docentes en las posibilidades reales de aprendizaje de los estudiantes.
2. Rescatar, de las proyecciones, elementos que deberían considerar en su institución para avanzar en la línea de la Prioridad (se podría recuperar y/o profundizar la actividad institucional sugerida en el Documento Prioridades Pedagógicas 2014-2015).
2. Rescatar, de las proyecciones, elementos que deberían considerar en su institución para avanzar en la línea de la Prioridad (se podría recuperar y/o profundizar la actividad institucional sugerida en el Documento Prioridades Pedagógicas 2014-2015).
miércoles, 19 de febrero de 2014
Módulo de Políticas Educativas para el Nivel Primario. Conceptos de Estado, derecho, escuela...
El
Estado, el sistema y la escuela
El
Estado, desde las perspectivas más democratizadoras, tiene la responsabilidad
ineludible de garantizar el derecho a una educación igualitaria. Una educación que
propicie el acceso, la permanencia y la culminación efectiva de los estudios de
todos los niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos de la República
Argentina. Una educación que permita que todos se eduquen en las mejores
condiciones materiales y humanas, y accedan a aprendizajes sociales relevantes
para desempeñarse como ciudadanos plenos, obtener trabajos dignos y proseguir
estudiando a lo largo de toda la vida.
En
palabras de Phillipe Meirieu (2013), la educación tiene como propósito la
emancipación entendida como la capacidad de poder expresarse, de defender
creencias, de ejercer un pensamiento crítico y ser sujetos libres que deciden
en conjunto sobre el bien común. Desde este posicionamiento, educar supone creer que es posible el cambio mejorando la
sociedad que construimos entre todos.
Ahora bien, el ejercicio del derecho a la educación demanda condiciones de
posibilidad. Un Estado democrático, presente, no delega en otros
su rol. Por ende, define y orienta su acción política hacia la afirmación y la
profundización de los derechos de todos los habitantes del territorio nacional,
reconociendo que las condiciones sociales en las que realiza su intervención están
signadas por la desigual distribución de bienes materiales y culturales.
Vivimos en un tiempo en que el Estado
recupera centralidad en el marco de su legalidad y autoridad para generar las
condiciones desde las cuales lo público se concreta, superando décadas de
debilitamiento del aparato estatal y sus instituciones. En suma, un tiempo en
el que Estado trata de estructurar intereses particulares, identidades
heterogéneas y diversidad política de grupos y organizaciones de la sociedad
civil en un proyecto colectivo.
La acción de estructurar y articular las
partes en un todo supone recuperar la noción de unidad de sistema en un indispensable
equilibrio político que corresponsabiliza al gobierno educativo nacional y los
gobiernos educativos jurisdiccionales en los procesos de concertación que se
dan el ámbito del Consejo Federal de Educación. Esto permite contar con un sistema educativo nacional que es público y está conformado
por escuelas de gestión estatal y de gestión privada, en diferentes formatos y
modos organizacionales.
Todas las escuelas participan activamente
en la construcción de lo público generando desde su hacer una experiencia común
y compartida. Así, definimos a una escuela como pública no exclusivamente por
su dependencia directa del Estado,
sino en la medida en que cada colectivo docente asume la responsabilidad
en la construcción de condiciones para el efectivo derecho a la educación. Entonces
lo común no es producto de acciones instrumentales sino que es una decisión
política que reconoce al Estado como un actor principal.
No educamos en abstracto sino desde la escuela en un tiempo histórico, en
un espacio geográfico, connotando trayectorias vinculares y de conocimiento con
formas singulares que contienen tanto las historias de vida de nuestros
alumnos/as como nuestras trayectorias profesionales. Es decir, las escuelas
existen en una relación dialéctica entre diferentes órdenes de tiempos
históricos sociales (pasado, presente y futuro); están situadas en un contexto
político, social, económico y científico/cultural que las coloca en la
necesidad de asumir ciertos propósitos de enseñanza inmediata, y en la
construcción de ciertas condiciones que en proyección permitan nuevas y mejores
realidades en clave de equidad y justicia.
Hoy, de la mano de un estado de
ampliación de derechos, nos enfrentamos a la tarea de revisar los sentidos y
mandatos de origen en cada uno de los niveles de la educación obligatoria.
El jardín de infantes que nos legó la ley
1420 fue una institución de carácter urbano y al servicio de los sectores
medios y altos de la población. Era una oportunidad para pocos. La exigencia de
que los jardines se establecieran en “ciudades donde sea posible dotarlos
suficientemente”, marca su nacimiento. ¿Cuáles eran las ciudades donde era
posible establecer jardines de infantes? ¿Cuáles serían los sectores sociales
que tendrían acceso a estos servicios?
Lugones a principios del siglo XX lo destaca con claridad “...niños bien vestidos, porque esto suele
ser, con más o menos disimulo, una condición para admitirlos, al constituir
habitualmente los tales jardines, un mero adorno de las escuelas donde funcionan. Así acaba de falsearse la institución,
convertida en objeto de lujo”, (Lugones, 1905).[1]
Recién en los últimos treinta años con el
fortalecimiento de los gobiernos constitucionales se van incorporando,
progresivamente, los niños de los sectores más pobres de la población como consecuencia
de una política educativa que priorizó una mayor democratización en el acceso a
la educación, dando cumplimiento a lo establecido por la legislación vigente
respecto de la obligatoriedad de escolarización de los niños de 5 años y la
universalización de la sala de 4 años. Para que esto fuera posible fue
necesaria la creación de instituciones y de secciones de jardín no sólo en las
zonas urbanas, sino también en el medio rural.
El jardín de infantes nace con el mandato
de preparar a los niños para su escolaridad primaria; en particular, importaba
la incorporación de hábitos y rutinas que aseguraran la adquisición de aquellas
pautas de conducta de “un buen alumno”, entre ellas, esperar turno, hablar sólo
por solicitud del docente, escuchar las consignas dadas antes de actuar,
realizar la tarea en el tiempo estipulado.
Esta tradición, aunque superada en el
pensamiento pedagógico, pervive en
las numerosas prácticas que desarrollamos cotidianamente. Persisten aún los
tiempos prolongados de actividades de grupo total centralizadas por el docente,
la exigencia de comenzar todos al mismo tiempo la tarea, de resolver de la
misma forma la propuesta tal como lo explicó el docente.
La adhesión a la Convención Internacional
sobre los Derechos del Niño modifica la representación de la infancia
reivindicando su carácter de sujeto de derecho; reconoce la capacidad de aprendizaje
de los niños y niñas en sus primeros años de vida; la existencia de nuevas
configuraciones familiares, en particular en relación a los cambios del rol de
la mujer en la sociedad.
La Ley de Educación Nacional del año 2006
ratifica el valor sustantivo de la
primera infancia para la historia de los sujetos en sociedad, en
consecuencia se propone la
obligatoriedad del nivel.
A partir de esta decisión se modifican
sus propósitos, se incorporan nuevos contenidos y campos de conocimiento y se
revisan los sentidos de la formación de los docentes; las condiciones
materiales y simbólicas para constituir la identidad del nivel.
Su democratización va de la mano de una fuerte expansión de las
salas de 4 y 5 años. Este crecimiento no es parejo en las diferentes
jurisdicciones pero es un crecimiento continuo. Sin embargo, un desafío es
avanzar en la garantía del derecho a la educación de los niños/as que concurren
al primer ciclo entre 45 días y dos años inclusive.
El nivel primario nace unido a la
convicción de la fuerte incidencia de la instrucción pública en la construcción
de la ciudadanía. Es conocido su efecto histórico en la formación de la
infancia en la Argentina, y también el especial lugar que el Estado le asignó
en la conformación de un común cultural en el país y en el imaginario colectivo
de nación. Su matriz supone la inclusión y la masividad como
rasgo característico. Su carácter universal y obligatorio, establecido ya en la
Ley 1420 favoreció su desarrollo institucional, reglamentario y territorial.
Esta tradición propicia actualmente toda acción en pos del interés y el cuidado
de la infancia, la convicción de que el mejor lugar para un niño es la escuela,
la preocupación por la dimensión valorativa y afectiva de los vínculos.
Por otra parte, cabe señalar que el modo
singular en que la escuela argentina asumió la construcción de lo común
dificultó el trato con la heterogeneidad y el vínculo entre conocimiento
escolar y conocimiento cotidiano, la cultura de origen y cultura escolar.
El desafío actual supone construir la experiencia
común sin que eso requiera de la negación de otras identidades. A la vez, el
nivel primario necesita ubicarse como nivel intermedio, que trabaja por la
efectiva obligatoriedad del nivel secundario, generando mejores expectativas en
sus alumnos para que puedan constituirse como estudiantes de ese nivel, tanto
por la confianza que genera en ellos como por los conocimientos que les brinda
para que esta posibilidad sea efectiva. Del mismo modo, los alumnos que inician
la escolaridad primaria lo hacen como egresados del nivel inicial, lo que
implica un conjunto de experiencias educativas que no se pueden desconocer.
Con respecto
al nivel secundario, su matriz de inicio estuvo orientada casi exclusivamente a
ser antecedente para la continuidad de estudios superiores y la formación de
las élites políticas. Su lógica de consolidación restringía tanto el acceso
como el egreso bajo el supuesto de una perspectiva de calidad sustentada en la
selección. Así, creció durante décadas dando respuesta a tal mandato,
desconociendo su contexto histórico de origen y conservando las formas, la
organización y los paradigmas culturales que ese sentido político imprimía.
A
partir de la Ley de Educación Nacional del año 2006, la obligatoriedad de la
escuela secundaria representa la promesa y apuesta histórica de la sociedad
argentina —como en otros momentos lo fue la escuela primaria— para la inclusión efectiva en la
sociedad y la cultura de todos los/ las adolescentes, y jóvenes de nuestro país
desde el reconocimiento de su derecho a culminar su trayectoria escolar.
Desde
esta perspectiva, la matriz originaria y con ella el particular modo de organizar
institucional y curricularmente la escuela necesitan repensarse para hacer efectiva
dicha obligatoriedad. Del mismo modo, las funciones prospectivas incluyen tanto
la ampliación de los derechos educativos hacia el nivel superior para todos los
jóvenes, como el acceso a la vida política y laboral de manera plena.
Para abrir la reflexión…
Después del recorrido realizado, de haber conceptualizado sobre el Estado,
las instituciones y los sujetos en clave de la organización del sistema
educativo argentino es necesario puntualizar y centrar las reflexiones
inherentes a un proceso de formación en el que se hace ineludible
convocarnos a:
ü Asumir la dimensión social de la educación en dos sentidos: por un lado la escuela como expresión del estado
en un territorio y por otro como forma de organización colectiva de la tarea de
enseñar.
ü Colocar en debate lo colectivo
y sus implicancias.
ü Reconocer el valor del trabajo
complementario entre quienes conforman la unidad escuela y de su relación con
otras instituciones y organizaciones de su realidad territorial.
ü Revisar nuestras formas cotidianas de participar; anticipar y provocar
nuevas condiciones.
ü Trabajar en los pendientes en cohesión con los principios de una escuela
para la ampliación de derechos.
ü Legitimar lo mejor de nuestra historia educativa.
ü Dar visibilidad y singularidad a la historia de esa institución con anclaje
en la dinámica de una realidad
social.
ü Asumir las incomodidades de abordar integralmente tensiones de la
actualidad escolar
Este proceso se constituye en
un problema ético de la tarea docente que es necesario abordar con el fin de
lograr que la tarea docente contribuya a construir mayores niveles de igualdad y
justicia, cuando persiste en enseñar todo a todos, cuando busca diversos modos
de transmitir el saber y de superar miradas estigmatizantes.
Son muchas las transformaciones y muchas
las esperanzas que anidan en estos tiempos que nos tocan protagonizar. Tiempos
de búsquedas y de convicciones, de obstinaciones y preocupaciones que pugnan
por encontrar los mejores modos de resolverse. Esos modos encuentran en la
participación y la reflexión crítica de nuestro hacer una estrategia valorable
de construcción.
Por esto, desde el Estado se apuesta a
una política de formación que produzca espacios que brinden la oportunidad de
reflexión, el debate del colectivo docente sobre algunos rasgos característicos
de la experiencia escolar que cimientan el proyecto formativo que les estamos
ofreciendo a los niños y niñas adolescentes y jóvenes de nuestro país.
La
escuela primaria en la Argentina
Políticas
prioritarias
No
creo que estemos en una época de retroceso de la escuela, creo que igual hay que mirarla con
benevolencia. La escuela no es una cosa que se inventó en cuatro días, es un
proceso de varios siglos que amasó y cristalizó, una de las instituciones más
exitosas de la cultura humana; como es un sistema para enseñar masivamente y
para cumplir el mandato de enseñar a todos. Hasta tal punto es lo mejor que
tenemos, que no hemos encontrado otra alternativa, entonces ,si no hemos
encontrado ninguna ,tal vez sea hora de pensar cómo se la mejora, antes de
satanizarla primero para hacer tierra rasa y hacer algo nuevo, que hasta ahora
no ha venido…[2]
La escuela primaria, como institución educativa vinculada a la
educación de la niñez en la Argentina, ha logrado construir un vínculo profundo
y significativo con cada generación
que ha transitado sus aulas. Durante décadas, fue altamente eficaz en
constituir una experiencia común, transmitir un conjunto de saberes y valores,
promover formas de participación e inclusión. Esa escuela logró su eficacia en
el marco de un Estado que ocupaba un rol protagónico en la vida social y
cultural de nuestro país; de familias que legitimaban la labor educativa de los
maestros y maestras por la confianza que la escolaridad generaba como modo de
inclusión y ascenso social.
Las profundas transformaciones sociales, políticas y económicas
vividas y condensadas en la década de los 90 trajeron nuevos escenarios a la
realidad educativa. La experiencia histórica de construcción de lo común que la
escuela intentaba recuperar a partir del advenimiento de la democracia se vio amenazada; los contratos entre
escuela y familia alterados, la misma noción de infancia puesta en tela de juicio.
Algunos modelos pedagógicos construidos durante una parte importante nuestra historia se trastocaron.
En muchos casos estos procesos significaron un alto deterioro
material y simbólico de los procesos de transmisión dados en la escuela y una
profunda interrogación sobre las posibilidades mismas de educar a todos. La
confianza en las posibilidades de que la escuela pudiera permitirle a los
chicos un futuro mejor que su presente se resquebrajó ante una sociedad que
sostenía la exclusión social ya no como una excepción sino como una realidad a
aceptar.
Los últimos años muestran un gran esfuerzo por
recobrar la escuela como espacio de enseñanza y revalorizar su función como
institución integradora, potenciadora de vínculos y lazos sociales, constructora
de ciudadanía. Diversas acciones pedagógicas y socioeducativas se han puesto en
marcha para reconstituir las condiciones necesarias para que todos los maestros
puedan enseñar y todos los niños puedan aprender. Hoy nos encontramos ante
desafíos que suponen fortalecer aún más estas acciones de manera de consolidar
políticas pedagógicas y socioeducativas de mediano plazo. En el centro de
nuestras preocupaciones se encuentra la necesidad de avanzar en nuevos modos de
hacer escuela al mismo tiempo que se generan los saberes necesarios para
realizarla.
Esto es así debido a que no siempre tenemos la mejor respuesta a
las realidades de enseñar en la heterogeneidad sin por ello, perder la
necesaria unidad del sistema. Muchas discusiones han atravesado el escenario pedagógico
de los últimos años; algunas de ellas han señalado duramente la imposibilidad
de la escuela en cumplir con las demandas que se le realizan. Ante estos
discursos, reponemos la frase de Feldman; la
escuela puede mostrar dificultades, pero sigue siendo y nosotros apostamos a
ello, el escenario privilegiado de formación de la niñez. La escuela tiene
en sí misma la capacidad pedagógica de educar a todo nuestros niños si logramos
organizar y dar mayor fortaleza tanto al despliegue de su tarea como a la
sistematización del conocimiento pedagógico necesario para llevarla adelante,
en las coordenadas de este mundo actual.
Lo dicho supone extender nuestras discusiones al conjunto de
condiciones que hacen posible la enseñanza y el aprendizaje en el contexto de
la escuela; entendida esta como espacio colectivo, producto del trabajo de sus
colectivos de trabajadores en
estrecha vinculación con las políticas desplegadas por los distintos niveles de
gobierno y la comunidad que la constituye.
Sin desconocer las dificultades que los escenarios culturales y
contemporáneos plantean, consideramos que la escuela primaria es un gran espacio de oportunidad y lugar de
encuentro cotidiano entre las generaciones. Como institución formadora merece
de nuestros mayores esfuerzos para que la experiencia escolar que en ella se
construye sea la más igualadora y enriquecida posible. Las políticas para el
nivel intentan consolidar un camino que siga fortaleciendo lo mejor de la
tradición pedagógica escolar argentina y latinoamericana que ha entendido a la
escuela con estas notas distintivas:
Escuela, espacio público de encuentro y comunidad
La escuela es un territorio de encuentro; entre maestros y chicos,
entre familias y maestros, entre
vecinos. La institución educativa sigue siendo –y de allí su potencia un
espacio de vínculo, para encarar proyectos entre todos. En épocas en las que el
encuentro cara a cara se reduce sustancialmente, la escuela persevera en la
presencia con la intención de que la coexistencia construya nuevamente
comunidad, sentido de pertenencia, experiencia colectiva. La escuela es el
lugar del “cara a cara” que sin duda genera conflictos, problemas,
desavenencias pero también fortalece la posibilidad de pensar y producir un
nosotros, de discutir en conjunto las ideas que tenemos, de pensar un camino
compartido. En suma, de sentirnos parte de una comunidad en la que crecemos y
nos desarrollamos.
En este sentido entendemos que lo común no necesariamente viene
dado; por el contrario, saber qué tenemos en común, comprender que es
imprescindible pensarnos más allá del yo, de “mi clase”, de “mi hijo” es una
experiencia a construir, es un proyecto profundamente humano y político en el
cual se juegan gran parte de nuestras posibilidades de futuro y en el cual la
escuela necesita decididamente tomar posición.
Escuela, espacio de aprendizaje para todos
La escuela se define
por ser la institución en la que distintas generaciones se encuentran alrededor
de una tarea prioritaria: aprender. En el caso de los niños y niñas, aquello
que la sociedad ha definido como relevante para ser ofrecido a las nuevas
generaciones. En el caso de los docentes, aquello que hace a la identidad de su
trabajo, enseñar. En efecto, los docentes aprenden también, cotidianamente en
la escuela, cuál es la mejor manera de hacer esta tarea, a partir de la
reflexión constante sobre lo que se hace, sus sentidos, sus alcances, sus
modos, sus efectos. Pensar la escuela como ámbito por excelencia del
aprendizaje nos permite pensarla como en continua creación, abierta a la
transformación, corriendo el límite de lo posible y de lo pensable.
Escuela, lugar de apropiación de saberes y recreación de sentidos
Definimos ya la escuela como un espacio de aprendizaje. En este
caso la entendemos como el lugar del conocimiento. Entendemos que la escuela
cumple su función cuando produce una diferencia, cuando pone un plus a la
experiencia que cada niño y niña llevan; en suma, cuando un niño puede hacerse
preguntas que no se hubiera realizado si no hubiera estado allí ( Lerner,
2004). La escuela es también el espacio para adquirir amor por el saber, para
alentar la curiosidad y la creatividad. Es la institución que se hace
responsable de la transmisión del patrimonio cultural, entendiendo el concepto
“responsable” en términos de “dar respuesta”, de encontrar los modos para que
esta transmisión se realice. Hablamos de transmisión sin entenderla como
cerrada o unidireccional: la escuela también es el espacio indicado para
recrear sentidos, para transformarlos, para producir personales e inéditas
versiones de este saber; para producir otros nuevos sentidos.
En la escuela circulan los saberes culturales provenientes de
diversas comunidades, de distintas experiencias históricas, de diferentes
campos de referencia. Una escuela igualitaria pone estos saberes en condiciones
de ser analizados, discutidos, apropiados y legitimados; una escuela que decide
en su tarea que ningún conocimiento será prohibido, ninguna cultura desmentida
o silenciada.
Escuelas, espacios de producción de la memoria pedagógica y
didáctica
Pensar en la apropiación de saberes y en el aprendizaje de este
modo es centrar nuestro interés en la enseñanza como práctica social, pública,
construida en conjunto, producto de una reflexión colectiva.
Entendemos la enseñanza como el trabajo de pensamiento y de acción
de maestras y maestros, que produce saberes y que a la vez recupera las mejores
tradiciones llevadas adelante en nuestro territorio y en los países hermanos.
Práctica nunca neutral, que discute y batalla contra aquellas herencias
pedagógicas que reproducen desigualdades y alejan a los sectores más
postergados de su derecho al conocimiento. La escuela es espacio para la
consolidación de una memoria pedagógica y didáctica que permita que cada grupo
de enseñantes no empiece cada vez como si fuera la primera, que garantiza la
continuidad de las propuestas de enseñanza, que afianza, en suma, los saberes
institucionales acerca de ella.
La escuela como contexto de despliegue y producción de
política educativa
Tal como hemos señalado, cada una de las escuelas de nuestro país
abre sus puertas diariamente para recibir a niños y niñas para enseñarles, cada
colectivo docente genera climas de confianza para aprender, posibilita formas
de relacionarse con los otros —tanto dentro de la institución como con el
entorno— y transmite saberes necesarios para comprender el mundo en el cual
vivimos.
En ese hacer cotidiano, cada una de estas escuelas forma parte de
un sistema educativo que despliega y expresa las intenciones y metas diseñadas
en las políticas educativas nacionales y provinciales. Esas políticas no
revisten el carácter transitorio de la acción propia de un gobierno, sino la
construcción de propósitos y estrategias comunes concertadas federalmente y
que, de forma paulatina, se consolidan como políticas de Estado.
En otras palabras, aquello que las sociedades definen como
horizonte educativo para las nuevas generaciones y que constituyen la expresión
de los compromisos que los adultos asumen ante los niños, niñas y jóvenes, toma
cuerpo en las políticas educativas. A la vez, estas recrean su sentido en el
hacer cotidiano de maestros y alumnos y, como fruto de ese encuentro colectivo,
se hace escuela.
En el Proyecto Educativo se pone en relación este registro común a
todo el sistema educativo con lo singular de cada escuela. Lo común como forma
de ligar a la infancia de nuestro país desde una experiencia educativa que la
incluya en un relato compartido, que le ofrezca oportunidades de desarrollarse
y crecer. Lo singular como lectura particular y atenta a los rasgos,
características y problemáticas que cada comunidad educativa porta, de manera
de impulsar sus potencialidades y de direccionarlas en el cumplimiento de las
propias metas construidas de manera común.
Así, las acciones que se despliegan todos los días en las escuelas
se vertebran en torno a este diálogo entre lo singular y lo común, entre lo
cotidiano y lo proyectado como largo plazo, entre las decisiones de los actores
en la escuela y las decisiones consensuadas en los otros niveles de gobierno.
Lo que nos interesa resaltar aquí es que en este diálogo no hay sumisión ni
puede existir paralelismo.
Las escuelas son entendidas como sujetos políticos, con
posibilidad de recrear, generar y alentar el proyecto educativo en clave
institucional y comunitaria. Esta tarea no es al margen ni como reflejo de lo
definido en otras instancias del Estado; tampoco se construye de espaldas a las
definiciones que los gobiernos provinciales y nacionales elegidos
democráticamente acuerdan. El diálogo es posible en la medida en que los
colectivos docentes hacen suyo el ideario pedagógico que las propias políticas
democráticas generan y estas sólo se hacen realidad en cada una de las
decisiones político-pedagógicas que los docentes toman a diario.
La escuela de punta a punta. Una reseña cuantitativa
Trabajamos en la escuela primaria. Somos parte de un nivel con tradición histórica y fuertemente
arraigado en cada localidad, pueblo o gran ciudad de nuestro país. No importa
el territorio, el color de la tierra, el paisaje; en grandes urbes, en los
lugares alejados, sobre rutas asfaltadas, calles, pasajes, caminos de tierras o
simplemente huellas; cada sendero de nuestro territorio tiene en algún lugar
una escuela primaria. Esta presencia que nos conmueve y hasta a veces
sorprende, hace explicito la importancia
social y política que la escuela primaria ha sostenido y sostiene para
todos.
Trabajamos en la escuela primaria pero eso no necesariamente
significa tener tan claro su envergadura; algunos datos estadísticos pueden
ayudarnos a tomar mejor nota de las características del nivel primario en el
país.
EN ESTE APARTADO FIGURARÁN, EN EL DOCUMENTO
FINAL LOS DATOS CUANTITATIVOS DEL NIVEL.
La escuela desde las normas que la sostienen y defienden
El
cuerpo normativo que regula la escuela primaria es amplio y contiene una
cantidad importante de regulaciones. En este caso haremos referencia a aquellas
de alcance común y nacional. En
cada jurisdicción estas normas tienen leyes provinciales y regulaciones
complementarias. En este módulo citamos sólo algunos fragmentos de estas normas
porque entendemos que colaboran en mejorar nuestro trabajo, le dan marco legal
a lo que en la escuela sucede y expresan, cada una de ellas, un avance en la
perspectiva del derecho a la educación
La
capacidad regulatoria del Estado es parte de la recuperación de su centralidad
y protagonismo en la vida social y política. Durante mucho tiempo se descreyó
de la norma y aún más en la capacitad o legitimidad del Estado en construirla.
Sin embargo todos somos testigos de lo que sucede cuando los cuerpos normativos
son dejados de lado, las leyes incumplidas o el valor político de la regulación
vaciado. Las normas no son mera letra, son el resultado del esfuerzo de una
sociedad que se expresa en un determinado momento. Recuperar el carácter
público de la educación supone también volver hacer lugar a las regulaciones y
retomar el sentido de disputa, de pelea por el derecho a la educación que en
ellas puede encontrarse.
Este
listado de regulaciones que a continuación se describe no es exhaustivo y no contiene,
decimos, el conjunto de las normas
ni la totalidad de ellas. Quien desee conocer estas normas en su
totalidad encontrará en el final del módulo los sitios oficiales para consultarlas.
·
La constitución nacional que establece las
garantías de derecho a la educación. En ella la inclusión de la convención
Internacional de los derechos del niño/niña y el adolescente
·
La ley
de educación nacional: que
expresa para el nivel primario, la duración, sus objetivos prioritarios.
·
El plan Nacional de Educación Obligatoria y
Formación Docente (resolución 188/12) que establece las metas para cada nivel
en el lustro 2012-2016 inclusive
·
La resolución n 174/12 del CFE que establece pautas
federales para el fortalecimiento de las trayectorias de los estudiantes de
nivel inicial, primario y modalidades.
·
Los documentos que el mencionado consejo ha
sancionado para las modalidades del sistema: especial, rural,
hospitalaria-domiciliaria, artística, adultos, contextos de encierro, educación
intercultural bilingüe.
Las políticas priorizadas para el período 2012-2016
El
Plan Nacional de Educación Obligatoria y Formación Docente enmarca la política,
los objetivos y las líneas de acción del conjunto del sistema educativo. Fue
construido de manera concertada y aprobado en el seno del Consejo Federal de
Educación en el año 2012 Las metas, acciones y estrategias propuestas en el
rigen para el conjunto del país y para todas sus escuelas. En el mismo plan se
establecen los plazos de despliegue de cada política y las responsabilidades
que le caben a cada administración
educativa llevar adelante. El plan no expresa todo lo que vamos a hacer; si
expresa lo que se ha decidido que es común para todo el país y que realizaremos
en conjunto.
Está
estructurado por niveles y, en
cada uno de ellos se explicitan tres objetivos que vertebran el conjunto de
acciones y estrategias.
I-
Ampliar y mejorar las condiciones
y formas de acceso, permanencia y egreso
II-
Fortalecer las trayectorias
escolares generando mejores condiciones para la enseñanza y los aprendizajes
III-
Fortalecer la gestión
institucional ampliando las estrategias educativas destinadas a niños y niñas
escolarizados y no escolarizados
El nivel primario se caracteriza
en nuestro país por su extensión y cobertura. En este sentido los principales
desafíos del nivel se encuentran vinculados a la extensión de la obligatoriedad
de los niveles con los que articula (inicial y secundario) como así también a
revisar y mejorar lo que sucede puertas adentro de la escuela en relación con
la organización de la enseñanza, la condición institucional, la experiencia
escolar de los niños y niñas; el trabajo comunitario, etc. Con respecto de lo
primero, diremos que el nivel necesita
reubicarse en un sistema en el cual se convierte en nivel intermedio;
recibe niños que tienen una escolaridad temprana cada vez más ampliada y que
espera contar con egresados que puedan cursar la escuela secundaria obligatoria
y lo hagan de manera completa y continua
En este sentido las políticas del
nivel se proponen seguir mejorando las condiciones materiales que las
comunidades educativas requieren para desplegar su tarea a la vez que ponen el
acento en las condiciones institucionales, pedagógicas y didácticas que nos
permitan que la escuela puedan realizar de otros modos, mejores modos, su
labor.
A continuación pasamos detalle a
algunas de esas líneas políticas del nivel:
1-
Ampliación gradual de la jornada escolar del nivel primario.
Ampliar el tiempo de la jornada constituye una
oportunidad para reconfigurar la propuesta pedagógica de la escuela primaria y
poner en valor su propuesta académica. Se trata de reposicionar a la escuela
pública como la institución formativa
por excelencia para todos los niños y niñas de nuestro país, hacer
posible que ingresen a la escuela un conjunto de saberes y experiencias - las
artes, las ciencias, otros idiomas, la tecnología - que, en el marco de una
sociedad desigual, algunos niños
y niñas aprenden por fuera de la escolaridad vigente.
La escuela amplia la escolaridad diaria de 6 a 8
horas desde una perspectiva pedagógica renovada, en la cual se formulan sus
propuestas de enseñanza desde los propósitos y metas enunciadas para el nivel,
considerando la singularidad de los contextos en los que despliegan su labor.
La organización de esta escuela implica la obligación de discutir y volver la
mirada sobre el conjunto de las experiencias que se ofrecen a los/as niños/as a
lo largo del día y en el transcurso de su trayectoria escolar, de manera que
todos/as puedan ser parte de la experiencia educativa que se les ofrezca
Una escuela que amplía su tiempo, puede transformar
sus dinámicas de trabajo en el tiempo escolar completo. Significa que la
extensión de la jornada no debe encararse políticamente como un agregado de
horas que se planifican institucionalmente de manera aislada, sino como el modo
en que los equipos de decisión pueden hoy
dar a la escuela primaria, paulatina y planificadamente, una organización más adecuada al trabajo
colectivo de docentes y niños. Para ello, la propuesta requiere la inclusión de
un tiempo de trabajo institucional del colectivo docente dispuesto a habilitar
una reflexión conjunta para el enriquecimiento de la propuesta escolar. Lo
dicho supone tomar decisiones desde los equipos de responsabilidad política que
resguarden las condiciones materiales y pedagógicas para que esto sea posible.
Cada jurisdicción ha planteado una meta concertada
con el Ministerio Nacional, alrededor de esta línea de acción que se propone al
2016 duplicar la cantidad de escuelas de jornada extendida o completa que
existen.
2- Fortalecimiento de las políticas
de enseñanza
Desde
hace varios años, las políticas de enseñanza han ganado en importancia
financiera, crecido en su envergadura e intensidad. Constituyen la centralidad
de la agenda del nivel en la medida en que pensar la enseñanza es pensar el
modo en que recreamos la transmisión de los saberes en la escuela, ponemos en
cuestión el modo igualitario o no de hacer efectivo el acceso al
conocimiento. Hacemos foco en el
aprendizaje ya que, pensar en el conocimiento desde la perspectiva de los
adultos es sin duda, volver a mirar la enseñanza y sus efectos. En suma, pensar la enseñanza como política
impone convertirla en asunto de Estado y por lo tanto responsabilizarse por sus
posibilidades de realización concreta y cotidiana.
Esto
supone el despliegue de acciones en diversas dimensiones: en el ámbito
institucional, generando condiciones para que los equipos docentes trabajen en
conjunto sobre las diversas situaciones que provoca la enseñanza en sus
escuelas, desde lo curricular; produciendo documentos de apoyo y orientaciones
concretas para la enseñanza, desde la tarea docente, incrementando la cobertura
e intensidad, donde será necesario acciones de formación permanente y
financiamiento de las tareas de diseño, gestión e implementación de dichas
acciones; en el ámbito socioeducativo, favoreciendo las estrategias del campo
educativo que mejoren la perspectiva escolar de los alumnos que más lo
necesiten; con equipamiento, dotando a las escuelas de los recursos
bibliográficos, textos de estudios y colecciones literarias que sean
necesarias.
Algunas
de las líneas más importantes en este sentido incluyen, el fortalecimiento de
la alfabetización inicial en el primer ciclo, la intensificación de los planes
de enseñanza de lectura en segundo ciclo, los planes de enseñanza de las
ciencias y las matemáticas; la ampliación de la cobertura de la enseñanza de
una segunda lengua, el mejoramiento de las condiciones de enseñanza para la
educación artística y la educación física, y la inclusión de otros contenidos
de enseñanza tal como educación sexual, convivencia, educación vial, educación
y memoria, entre otros
ü Fortalecimiento de la alfabetización inicial en el marco de la
implementación de la unidad pedagógica.
La
alfabetización supone el acceso, la apropiación y la recreación de la cultura
escrita como bien simbólico de la humanidad, asociado al desarrollo para la
vida personal, a la igualdad de oportunidades educativas, a la emancipación, al
ejercicio de la ciudadanía. A la
vez, la lectura y escritura constituidas en contenido de enseñanza, tiene una especial incidencia en la
trayectoria escolar de los niños y niñas. En este sentido la resolución 174/12
consigna con claridad la relevancia que estos aprendizajes tienen en la
promoción de los estudiantes y con ello su destino escolar.
En
los últimos años el cuerpo de saberes e investigaciones sobre la enseñanza de
la lectura y escritura ha crecido de manera sustancial y constituyen un gran
aporte para delinear y llevar adelante una política de alfabetización inicial
efectiva y masiva; sin embargo estos saberes no necesariamente circulan con
intensidad en las escuelas. Un debilitamiento del saber sobre cómo enseñar a
leer y a escribir obligan a redoblar el esfuerzo de las políticas que permitan
modificar esta situación
En
este sentido el plan nacional de educación obligatoria considera relevantes que
las acciones en este campo ganen escala y mayor integralidad. Es necesario
sumar a la mayor cantidad de actores posibles a los procesos de formación y
gestión de la enseñanza en primer ciclo de manera de que la unidad pedagógica
sea la condición regulatoria, material e institucional en el que pivoteen otros
procesos de alfabetización.
El
Ministerio Nacional y las jurisdicciones vienen desarrollando una propuesta de
desarrollo profesional docente en alfabetización inicial que sigue vigente y
que se verá plenamente fortalecida por la llegada universal de bibliotecas de
aula para todas las escuelas del país. Este logro sin duda histórico para la
enseñanza necesita será acompañado por los procesos de asesoramiento y
capacitación que sean pertinentes. Dentro de esta línea se
incluyen las siguientes acciones:
ü Para leer con todo.
Intensificación de la enseñanza de la lectura en segundo ciclo
En consonancia con lo establecido por el Consejo
Federal de Educación en la Resolución Nº 134/11 sobre la realización de
acciones sistemáticas de lectura en las escuelas, se ha delineado la Política
Nacional de Intensificación de la enseñanza de la lectura, Para leer con todo, llevada
adelante desde el año 2012 y concentrada en la enseñanza de la lectura
–inicialmente- en los grados de cierre de ciclo (3º y 6º).
Se hace foco en la enseñanza de la lectura
puesto que tanto en la escuela como fuera de ella, la lectura de los niños y
jóvenes suele ser vista más como problema social y déficit individual que como
objeto de enseñanza. En efecto, expresiones como “a los chicos no les interesa
leer” o “los chicos no comprenden lo que leen” son frecuentes en las escuelas y
también en los medios de comunicación cuando se dan a conocer los resultados de
algunas evaluaciones generalizadas.
Cuando la lectura es percibida como objeto de
enseñanza escolar, suele limitarse o bien a la alfabetización inicial (el logro
de la primera autonomía lectora, en general vinculada al dominio del sistema
alfabético) o bien a prácticas de enseñanza altamente estructuradas en una
serie de pasos rígidos que se aplican a cualquier texto, más allá de sus
características y de las estrategias de lectura diferentes, asociadas a
diversos propósitos.
Con el fin de revertir esta situación, se propuso
un conjunto de acciones que tienen como finalidad instalar la enseñanza de la
lectura a lo largo de toda la escolaridad y en todas las áreas del currículum,
con prácticas sustentadas en y coherentes con los actuales desarrollos teóricos
y didácticos acerca de la lectura y de su aprendizaje, adecuadas a los contextos
socioculturales actuales (variados y complejos), planificadas, sistemáticas y
sostenidas a nivel institucional y de aula, tal como se plantea en los NAP.
Esta
política se sustenta en el trabajo mancomunado de los diversos equipos y áreas
ministeriales, tanto en el ámbito nacional como jurisdiccional, de manera de
hacer converger los esfuerzos técnicos en el acompañamiento y apoyo a las
escuelas para que las mismas puedan asumir el protagonismo de la tarea. Por su
carácter universal, esta línea tiene el desafío de ser conducida y llevada
adelante por los propios actores del sistema educativo, los colectivos
docentes, directores y supervisores, de los cuales se espera el liderazgo
territorial de las acciones acordadas. Se desarrollan videoconferencias con el
fin de que puedan ser vistas en todas las jurisdicciones y se realizan dos
encuentros por año, de intercambio y reflexión en cada región del país.
ü Plan Nacional de
ciencias naturales
El
Plan de Ciencias Naturales, tiene
como propósito consolidar las políticas de enseñanza en el nivel entendiendo a
las mismas como la responsabilidad indelegable del Estado de acompañar y
proponer mejores condiciones de enseñanza en cada escuela aportando al
desarrollo cotidiano de la misma en el marco de los NAPs y las prescripciones
curriculares jurisdiccionales. El primer objetivo de la instalación del Plan es
que de cumplimiento a los tiempos destinados a la enseñanza en el área,
tradicionalmente relegada en el día a día de la escuela. A partir de esta
primera premisa, construir con los maestros mejores modos de enseñar y aprender
ciencias naturales en el nivel.
Esta
preocupación por llevar el curriculum a las aulas supone no solo una
determinada selección y organización de contenidos prescritos, sino una determinada
visión de la ciencia como práctica cultural y de producción de conocimiento no
elitista, abierta a todos y todas, fundamental para la formación de una
ciudadanía crítica y responsable.
La estrategia principal del plan se basa en la designación de Acompañantes
Didácticos especializados en la didáctica del área y que cumplen un trayecto de
formación obligatorio a cargo del equipo de coordinación central. Estos
Acompañantes tienen a su cargo el trabajo con maestros y directivos de un grupo
de escuelas que les es asignado. Sus tareas son promover y sostener los
componentes principales que estructuran el Plan a saber:
- Un abordaje
institucional: tomando como unidad de trabajo la escuela en
su conjunto, el Plan apunta a fortalecer la dimensión colectiva de la enseñanza
y la continuidad de la misma a lo largo de la trayectoria escolar de los
alumnos. El abordaje institucional se ofrece como una garantía de que la
escuela vaya ganando en autonomía e integre dentro de sus prácticas habituales
el impulso que se espera impriman las premisas y acciones que proponga este
plan de enseñanza.
- Desarrollo profesional docente: como práctica de
formación continua de maestros y maestras, respetuosa de los saberes que los
mismos han construido en la experiencia escolar, desde una apuesta
formadora que propone un diálogo entre estos saberes y la revisión crítica de
sus prácticas a la luz de los aportes teóricos y prácticos de otros
actores (formadores, científicos, académicos, etc). Sin ser especialistas en cada
una de las áreas de conocimiento que deben enseñar, los docentes son portadores
de un bagaje de conocimientos y experiencias que no pueden ser soslayadas.
Resulta fundamental asumir que el docente no puede ni debe ser suplantado o
considerado un reproductor de propuestas elaboradas por otros. Sus
conocimientos tienen un alto valor intrínseco que debe ponerse en juego ya que
son ellos los que están cada día y todos los días con sus alumnos asumiendo la
responsabilidad principal de la enseñanza. Valorar y proyectar sus
conocimientos así como brindarles otros que los amplíen y potencien será una
tarea prioritaria del plan.
- Dotación de recursos para la enseñanza y el aprendizaje:
que amplíen el abanico de propuestas que maestros y alumnos pueden abordar a la
vez que garantice condiciones más justas de labor para ambos.
- Estrategias de sustentabilidad y continuidad en el tiempo:
adoptando una serie de decisiones tendientes a permitir que las prácticas
pedagógicas instaladas desde el plan se imbriquen en el sistema. La instalación
de recursos para la enseñanza de las ciencias naturales y un plan de trabajo
centrado en la institución, acompañando el proceso de puesta en práctica de la
enseñanza del área, no es condición suficiente para que ésta sea progresivamente
asumida en forma autónoma por los directivos y docentes. La sustentabilidad y
continuidad en el tiempo de la propuesta requiere de una articulación entre los
diferentes componentes que aquí se describen que permitan que los docentes
adquieran la seguridad y la pasión de enseñar a sus alumnos un modo particular
y potente de interpretar los fenómenos del mundo natural.
- Consideración y respeto por los contenidos curriculares y su enseñanza
explícita: entendiendo que el plan debe hacer
realidad la enseñanza de los contenidos curriculares acordados federalmente a
partir de los NAPS, en el tiempo estipulado. Esto es particularmente relevante
en un área tradicionalmente relegada en el tiempo real de clase.
ü Plan Nacional de
ciencias matemática
El Plan “Matemática para todos” se
enmarca en la consolidación de políticas de enseñanza llevadas adelante por el
Estado Nacional, teniendo como propósito general, promover un mejoramiento de
la enseñanza de la matemática en la escuela primaria. Tiene como base el
fortalecimiento de acuerdos colectivos para la enseñanza y el sostenimiento de
un proyecto formativo en el área de matemática que incluya una adecuación de
los NAP a su contexto y que promueva trayectorias escolares exitosas para todos
los chicos y chicas.
Para
ello, se propone generar y sostener en las escuelas un espacio de
acompañamiento a la tarea de enseñanza, y la especialización de un grupo de
maestros y capacitadores, cuyo eje será el análisis de secuencias didácticas y
la reflexión sobre su implementación en las aulas. Estas secuencias de
actividades para los alumnos han sido elaboradas sobre saberes considerados centrales en 4to, 5to y
6to grado, atendiendo a los Núcleos de Aprendizajes Prioritarios, acordados
federalmente y a las propuestas incluidas en los Cuadernos para el Aula
elaborados por el Ministerio de Educación de la Nación.
Además
de material impreso con las secuencias y orientaciones para los maestros, se
cuenta con una caja con recursos y
juegos didácticos para los alumnos, que se entrega a cada escuela participante.
El dispositivo incluye el apoyo a los docentes y directivos mediante la visita
de acompañantes didácticos a las escuelas y el desarrollo de capacitaciones
para los maestros agrupados en núcleos de escuelas cercanas, y para los
acompañantes didácticos. Asimismo se conforma una red de maestros orientadores
Participan todos los docentes de 4to a 6to grado de cada una de las 1700
escuelas previstas en una primera etapa
Son propósitos del plan:
-
La construcción y explicitación de acuerdos
colectivos para la enseñanza en el segundo ciclo, orientados a la protección de las trayectorias escolares de
todos los niños y las niñas.
-
El sostenimiento de un proyecto
formativo en el área de matemática que, en el marco de los NAP, se responsabilice
de una mejora en los resultados de los
aprendizajes de los alumnos.
-
La consolidación de un espacio
institucional de intercambio entre colegas a propósito de las decisiones
de enseñanza.
- El fortalecimiento de la formación de equipos provinciales y locales para el acompañamiento
a la tarea de enseñanza.
ü
Fortalecimiento
de la enseñanza de las ciencias sociales.
En esta línea continuaremos con el desarrollo de
las cátedras de enseñanza de las ciencias sociales y a la vez emprenderemos un
trabajo de formación de acompañantes que puedan asesorar a las escuelas en la
enseñanza de esta área. También se cuenta con el dispositivo para el
mejoramiento de las ciencias sociales entregado en el documento del año 2011.
Por otra parte se financiarán las iniciativas jurisdiccionales vinculadas al
despliegue de acciones de capacitación y asesoramiento
ü Primaria digital: utilización de
las TIC en la enseñanza y el aprendizaje.
Primaria
Digital es la línea de incorporación pedagógica de TIC (Tecnología de la Información
y la Comunicación). Su objetivo es
garantizar el derecho a una educación de calidad para todos los niños y las niñas de nuestro país.
Primaria Digital se despliega en tres líneas de
acción, que se articulan entre sí: equipamiento de Aulas Digitales Móviles
(ADM) para las escuelas del nivel primario de todo el país, el desarrollo de un
entorno multimedial y de materiales, y
la capacitación a docentes y equipos técnicos
Son sus objetivos:
- Promover el acceso a equipamiento digital en
forma gratuita.
- Generar nuevas y
mejores
condiciones para el logro
de aprendizajes
relevantes y significativos.
- Integrar lenguajes multimediales a las
dinámicas escolares.
- Desarrollar en los alumnos y alumnas las
capacidades necesarias para que sean protagonistas en los entornos
tecnológicos.
- Posibilitar el acceso de los alumnos y alumnas
a contenidos de calidad a partir de un entorno multimedial que se propone además, como un espacio de interacción y
creación.
- Renovar
tiempos y dinámicas escolares a partir de la reorganización del espacio
físico y el
despliegue de nuevas estrategias
de trabajo con los
alumnos, y entre los mismos
docentes.
- Ampliar el universo cultural de los alumnos y
las alumnas del nivel primario a partir del acceso a diversas fuentes de
información.
- Propiciar el desarrollo profesional de los
docentes con el propósito de abrir espacios de reflexión, recuperación de
experiencias anteriores y acciones concretas con TIC en las aulas.
Las
Aulas
Digitales Móviles (ADM) potencian el trabajo colectivo y colaborativo en las
aulas, a partir de un dispositivo tecnológico multimedial de estructura
modular.
Por otro parte permiten planificar distintos tipos
de usos según la necesidad pedagógica. De este modo habilita el trabajo
ü En
red, conectados al Servidor Pedagógico. Individual, en donde cada alumno
trabaja con una computadora portátil.
ü En
subconjuntos, en donde hay distintas combinaciones funcionando: algunos
trabajan en red, otros en grupo y otros individualmente.
Las netbook de las ADM y el Servidor Pedagógico,
llevan cargados el entorno multimedial de Primaria Digital, que se propone
como un espacio donde alumnos y docentes puedan actuar e interactuar, donde construyan entre todos un
territorio colaborativo y creativo propio, y desarrollen actividades que
potencien la enseñanza y el aprendizaje.
La capacitación “TIC en la escuela primaria: se plantea a través de un dispositivo de
modalidad semipresencial a dictarse en territorio durante el plazo de
aproximadamente 8 meses, desde su
inicio. La capacitación está destinada a la totalidad de
escuelas primarias bajo la cobertura del Programa PIIE, alcanzando un total de
3800 instituciones aproximadamente.
Los cursos de
capacitación en TIC están dirigidos a docentes de escuelas bajo cobertura PIIE
y sus directores (6 ó 7 en total), más supervisores de estas escuelas,
bibliotecario, referente informático en los casos que las escuelas lo posean.
2-
Reorganización de las Trayectorias Escolares
ü Diseño de propuestas pedagógicas contextualizadas para la
terminalidad del nivel primario, destinadas a niños y niñas con 3 ó más años de
sobreedad.
Las problemáticas de repitencia y
sobreedad requieren por su complejidad, medidas de largo, mediano
y corto plazo. Para
las medidas de mediano y corto
plazo se propone una estrategia de terminalidad de la escuela primaria
destinada a estudiantes con tres o cuatro años de sobreedad, de carácter
excepcional y por única vez. Supone un proyecto de cursada y/o
terminalidad de la escuela primaria que abarque como máximo tres años con alternativas
institucionales para estos niños a partir de una estructura curricular modular,
materiales de apoyo a la enseñanza, extensión del calendario y de la jornada
escolar como así también la participación de otros actores sociales y
comunitarios en el apoyo de la escolaridad.
La
meta prioritaria de esta acción es volver a filiar a los chicos y chicas con la
escuela y para ello es necesario restituir la convicción de la igualdad de
capacidades y de posibilidades que todos los niños
tienen de aprender.
En
este sentido, pensamos una propuesta pedagógica que tenga un efecto intenso en
los niños y niñas, los convoque e interese. Para que esto ocurra consideramos
importante apelar a otros modos de acceso al saber introduciendo diferentes
estrategias que amplíen sus espacios y formas de aprender. Comenzará
con una primera cohorte destinada a aquellos niños o jóvenes que se encuentren
en primer ciclo
ü Intensificación
de la enseñanza para estudiantes en riesgo de repitencia. Alternativas
escolares para niños con sobreedad menor a tres años
Reorganizar
la trayectoria escolar de los estudiantes que por diversas razones vieron
interrumpida o discontinuada su escolaridad se ha convertido en una prioridad
para el nivel primario. Para ello se han diseñado y desarrollado, en cada una
de las jurisdicciones, propuestas de fortalecimiento y aceleración de los
aprendizajes.
Las
propuestas de fortalecimiento de los aprendizajes están destinadas a
estudiantes que se encuentran en la situación de regreso a la escuela o de
repitencia reiterada y necesitan recuperar y fortalecer en un corto tiempo
ciertos aprendizajes para integrarse más plenamente a sus grupos. Los procesos de aceleración de los
aprendizajes están destinadas a estudiantes con sobreedad que podrían tener un
trabajo intensivo durante el año, que les permitiría adelantar un año al
término del ciclo lectivo (por ejemplo, pasar de 4to grado a 6to grado) o
realizar una promoción anticipada a mitad de año, previa evaluación (por
ejemplo, pasar a mitad de 5to a 6to grado).
Proponemos mirar la situación educativa general
desde una perspectiva que no
genere fragmentación o segregación, sino que promueva recorridos diversos,
simultáneos, diversificados que ayuden a concretar el derecho de todos los
estudiantes a transitar una escolaridad de calidad y llegar a completar sus
estudios. La posibilidad de que todos los chicos en diferentes momentos
recorran en simultáneo diferentes espacios de aprendizaje, o participen en más de
uno evita situaciones de estigmatización o segregación y les brinda a los
estudiantes la posibilidad de realizar sus recorridos escolares de modo más
flexible.
En esta línea se incluyen todas las acciones que
las jurisdicciones realizan en torno tanto del apoyo pedagógico de los niños y
niñas a través de extensión de la escolaridad, acciones personalizadas, grados
de nivelación, grados de aceleración, estrategias socioeducativas como así
también las acciones que las jurisdicciones emprendan para mejorar los modos en
que los maestros enseñan a estos estudiantes o bien accione que favorezcan el
trabajo institucional en las escuelas de los departamentos que presentan mayor
índice de repitencia en la jurisdicción. Todas estas líneas contarán con la
asistencia técnica y apoyo financiera desde el plan de educación obligatorio
presentando a la dirección de nivel primario el proyecto pertinente.
3- Fortalecimiento
Institucional
ü Desarrollo
de las acciones del Programa Integral de Inclusión Educativa (PIIE)
El
PIIE tiene el propósito de generar en las escuelas bajo su cobertura,
condiciones para propiciar experiencias educativas igualitarias.
Este
trabajo requiere fortalecer e intensificar algunos de los propósitos centrales
del nivel primario como son:
garantizar el acceso y la permanencia en la escuela primaria a todos los niños
y niñas; mejorar las capacidades de lectura y escritura de los estudiantes con
intensificación de acciones en tercero y sexto grado; desarrollar estrategias
que mejoren la enseñanza de la lectura y la escritura en primer ciclo; lograr
que la enseñanza de las ciencias Naturales y las ciencias sociales se haga
explícita en el primer ciclo de la escuela primaria.; respetar el tiempo
establecido normativamente en la enseñanza de las ciencias sociales y las
ciencias naturales en el segundo ciclo; intensificar la enseñanza de la
matemáticas en el segundo ciclo; fortalecer los vínculos entre la escuela, la
familia y las organizaciones de la sociedad civil; utilizar los recursos
materiales que el Estado pone a disposición en cada institución escolar.
De
esta forma, con los fondos que las escuelas reciben lo destinan a financiar
acciones y tareas que permiten alcanzar uno o dos de los propósitos
mencionados. Las escuelas tienen el acompañamiento del supervisor y de un asistente técnico pedagógico perteneciente al programa. Por
otra parte se transfiere a cada
escuela un fondo escolar para la compra de útiles escolares para la tarea de
los niños en la escuela.
Si bien estas líneas de acción son compartidas por
las distintas modalidades, estas a su vez cuentan con acciones especificas que
se detallan a continuación:
ü La
Modalidad de Educación domiciliaria y hospitalaria
Para
garantizar el acceso, la permanencia y el egreso universal del sistema educativo,
es necesario ofrecer diferentes opciones organizativas y formatos
institucionales que permitan adquirir por diferentes vías, los conocimientos y
aprendizajes necesarios para actuar en la sociedad y desarrollar el propio
proyecto de vida. El logro de la igualdad educativa para los alumnos en
situación de enfermedad, exige el desarrollo e implementación de una oferta
educativa flexible y adaptada, que le permita acceder a una educación de
calidad con el fin de lograr la continuidad en el sistema educativo.
El
reconocimiento de la población que se encuentra impedida de acceder o
permanecer en las escuelas del sistema educativo debido a situaciones de
enfermedad, que se complejizan muchas veces debido a la vulnerabilidad social,
exige la participación en el proceso general de construcción y concreción de la
igualdad educativa, en el marco de un sistema educativo más inclusivo, justo e
igualitario.
Las
propuestas pedagógicas deberán girar en torno a los contenidos propios del
nivel. Las intervenciones desde esta modalidad se orientarán a dar continuidad
a los aprendizajes, de modo que cuando el alumno pueda reintegrarse a su
escuela se encuentre en condiciones pedagógicas similares a sus compañeros de
clase.
Las
Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) forman parte de la educación
primaria y en la modalidad debe contemplarse la utilización y aprovechamiento
integral de los recursos digitales que garanticen la inclusión plena de los
alumnos.
[1] En este texto
Lugones justifica la razón por la cual siendo Inspector de Enseñanza decide
cerrar el Profesorado que formaba a las maestras jardineras, con la intención
de que esos recursos se utilizaran para la enseñanza primaria.
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